¿Has sentido alguna vez esa sensación de calma y bienestar después de abrazar a un ser querido? ¿Esa conexión especial que se crea entre una madre y su hijo durante el parto? ¿Ese deseo de compartir intimidad con tu pareja?
Todos estos sentimientos están relacionados con la oxitocina, una hormona que juega un papel fundamental en nuestras relaciones sociales y nuestra salud emocional.
En este blog, exploraremos a fondo el papel desconocido de la oxitocina, sin relegar su importancia en la vida reproductiva de las mujeres, el embarazo, el parto y la lactancia.
La oxitocina, también conocida como la “hormona del amor” o “del vínculo”, se produce en el hipotálamo y se libera en el torrente sanguíneo. Es esencial para la reproducción, el parto, la lactancia y las relaciones sociales. Sin embargo, no se limita únicamente a estos ámbitos, también se libera en respuesta a una variedad de estímulos, entre los que se encuentran:
La psiquiatra, Marián Rojas Estapé en su libro “Encuentra a tu persona Vitamina”, habla de estos estímulos y de cómo la oxitocina es vital en las relaciones familiares, sociales, laborales y a nivel de pareja.
La oxitocina no trabaja sola. Estudios recientes han revelado sus conexiones con otras sustancias químicas cerebrales como la dopamina, la endorfina, la serotonina e inclusive con la testosterona; cada una de estas tiene la capacidad de mejorar el estado de ánimo e impulsar el bienestar general. Wang et al. (2021) encontraron como la oxitocina aumenta la liberación de serotonina. Los investigadores utilizaron un modelo animal para estudiar estos efectos y creen que estos hallazgos podrían tener implicaciones para tratamientos de la depresión y otros trastornos del ánimo.
Por otro parte, Engert et al (2016), encontraron una asociación positiva entre la oxitocina y el cortisol (conocida como la hormona del estrés), durante períodos tensos, al igual que Pierrehumbert et al (2010), que sugieren que los incrementos en oxitocina están relacionados con la disminución en cortisol. Lo anterior, ofrece nuevas posibilidades y perspectivas sobre poder manejar el estrés a través de la regulación hormonal.
Otro análisis que evidencia esta relación es el estudio de Alley et al (2019), en el que hacen una contribución a la comprensión de la compleja interrelación entre la oxitocina y el cortisol, proporcionando evidencia del funcionamiento conjunto de estas dos hormonas bajo estrés y su comportamiento diferente bajo otros estados psicológicos.
La oxitocina tiene un papel fundamental en nuestro bienestar emocional ya que investigaciones recientes sugieren que su aumento puede reducir las probabilidades de experimentar síntomas de ansiedad y depresión. Según Serón y Osorio (2021), la oxitocina es importante en la salud mental dado que es fundamental en los procesos de regulación social como lo son las respuestas al estrés, ansiedad y el manejo de emociones.
Como se mencionó anteriormente, este aumento, genera una disminución en los niveles de cortisol, lo que explica cómo en esos momentos de incidentes traumáticos tenemos esa sensación de calma, que nos toma por sorpresa. La oxitocina en esos momentos es la responsable al actuar como una especie de regulador, contrarrestando los efectos perjudiciales del cortisol y contribuyendo así a nuestro bienestar emocional.
La oxitocina es una hormona fundamental para las relaciones sociales y está intrínsecamente vinculada al desarrollo de los lazos humanos; ayuda a crear un sentido de conexión y confianza entre las personas, y a promover comportamientos altruistas y prosociales.
Por ejemplo, se libera cuando abrazamos a alguien, lo que nos ayuda a sentirnos más conectados y seguros; durante el sexo, contribuyendo a la sensación de intimidad y placer, o en los vínculos sociales como el enamoramiento, en donde no solo se libera oxitocina sino diversas sustancias en el cerebro, tal como lo menciona González (2020), “el aumento en las concentraciones cerebrales de oxitocina influye no sólo al facilitar un estado emocional positivo, sino que favorece el apego hacia la pareja. De hecho, la presencia del ser amado incrementa los niveles de oxitocina en nuestro organismo”.
Hay muchas acciones que podemos hacer para aumentar los niveles de oxitocina de forma natural. Aquí tienes algunos consejos:
En conclusión, la oxitocina es una hormona maravillosa que desempeña un papel fundamental en la vida de las mujeres. Hemos desentrañado sus conexiones vitales con la maternidad, el parto, la lactancia y las relaciones humanas, descubriendo que va más allá de ser simplemente una hormona reproductiva, esta hormona del amor y del vínculo nos brinda una serie de beneficios emocionales y físicos.
Espero que este blog haya sido una fuente de conocimiento y un recordatorio del poder que tiene la oxitocina en nuestras vidas. Al conocer más sobre esta hormona y su influencia en nuestras relaciones y bienestar emocional, podemos aprender a aprovecharla de manera consciente y constructiva.
Te invito a seguir leyendo nuestros próximos blogs, donde abordaremos diversos temas relacionados con la psicología, el bienestar emocional y la salud mental. A medida que profundicemos en estos temas, podrás obtener aún más herramientas y conocimientos para mejorar tu vida y tus relaciones.
Como psicóloga especialista en el área clínica, estoy convencida en el poder de la oxitocina y en la capacidad de cada individuo para cultivar relaciones saludables y satisfactorias. Si estás buscando un apoyo profesional en tu camino hacia el bienestar emocional, no dudes en contactarnos. Estaremos encantados de ayudarte, brindándote nuestro apoyo y experiencia en cada paso del camino.
Recuerda que, en la Fundación los Sueños de Maleja, como expertos en temas psicológicos, estamos aquí para ayudarte a comprender y manejar cualquier aspecto de tu vida en el que la oxitocina pueda desempeñar un papel importante. Nuestro enfoque y experiencia nos permite brindarte un espacio seguro donde puedas explorar tus emociones y relaciones de manera saludable.